Así lo reveló la ASTA, Sociedad Estadounidense de Agentes de Viajes, en la solicitud de ayuda presentada este mes al Congreso de Estados Unidos, por de 9.300 millones de dólares para sus 14.000 agencias de viajes miembros.
La solicitud también contempla un programa de Subvenciones de Empleo en Viajes para toda la industria en el Departamento del Tesoro basado en el Programa de Apoyo a la Nómina de las aerolíneas.
Sin embargo, según manifestó la ASTA, asumiendo el acceso a un segundo programa de protección salarial, beneficios de desempleo y otros programas de alivio, más del 70% de las agencias de viajes no lograrán sobrevivir en seis meses, y el 85% no lo logrará más allá de los próximos 12 meses.
Según la asociación, en las agencias de viajes más de nueve de cada diez ingresos comerciales se redujeron al menos en un 75% en 2020 e incluso con el alivio de la Ley CARES y las ayudas posteriores, cerca del 64% de las agencias encuestadas despidieron al menos a la mitad de su personal.
“Hasta ahora, el apoyo financiero para la industria de viajes ha sido trágicamente inadecuado, y especialmente en sectores menos visibles como las agencias de viajes. La gran mayoría de las 130.000 agencias de viajes de los Estados Unidos son pequeñas empresas propiedad de mujeres. Nuestros funcionarios electos deben asumir la responsabilidad de las consecuencias de sus acciones, así como las de los reguladores a los que les encargan la gestión de la salud pública”, dijo Zane Kerby, director ejecutivo de ASTA.
Y agregó: “Hacemos un llamado a la Administración y al Congreso para que tomen medidas inmediatas para brindar un alivio directo y específico mientras estas restricciones a los viajes sigan vigentes hasta la creación de un programa de subvenciones de emergencia para agencias de viajes y otras pequeñas empresas que dependen de los viajes”.