Con la participación de cientos de cibernautas vinculados a la industria turística se llevó a cabo el martes 31 de marzo a las 10:00 a.m., un panel virtual (o webinar) con algunos de los más importantes protagonistas del sector aéreo y de las agencias de viajes en Colombia.
La iniciativa fue liderada y moderada por el ex viceministro de Turismo, Juan Pablo Franky, hoy vinculado al Grupo Aviatur, y fue posible gracias a las herramientas tecnológicas de la empresa MyReveneu.
En esta ocasión participaron la presidenta de Anato, Paula Cortés Calle; el empresario Jean Claude Bessudo; el gerente de IATA en Colombia, Andrés Uribe; y directivos de las aerolíneas Latam Airlines, Viva Air y Avianca.
Respecto a los propósitos del panel, Franky aclaró: “No pretendemos expresar posiciones ni tenemos la varita mágica para resolver los problemas. Lo que buscamos con este espacio es mantenernos comunicados, compartir experiencias, ideas y preocupaciones”.
Lo que dijo Paula Cortés Calle
La presidenta de Anato señaló que las agencias de viajes se encuentran viviendo el día a día, el minuto a minuto, evaluando “cómo podemos salir a flote y tener oxígeno para mantenernos”, todo en el marco de una gran incertidumbre.
De acuerdo con Cortés Calle, uno de los grandes desafíos a futuro será “cómo tener a los turistas nuevamente confiados” a la hora de viajar. “Antes estábamos muy preocupados por el tema bélico, especialmente en nuestro país, pero ahora el gran reto es que los viajeros vayan a todos los destinos sin miedo a contagiarse o a afectar su salud”, manifestó.
Posteriormente, la directiva gremial destacó la rápida reacción de gremios y Gobierno al inicio de la crisis. “Obviamente nadie sabía en lo que estaríamos hoy (…) nos hizo falta, precisamente porque no sabíamos. Y ese es el trabajo que estamos haciendo ahora con el Gobierno”, comentó Cortés.
Y enfatizó: “Quiero precisar algo, para que todos estemos en la misma página: Este es un evento en el que todos vamos a perder. Mucha gente pretende que el Gobierno las va a salvar, que Anato los va a salvar, que ATAC las va a salvar. Realmente esto es un trabajo difícil para todos y es una reinvención para todas nuestras industrias”.
Sobre el rol que jugarán las agencias de viajes en la recuperación, la directiva gremial señaló que será “supremamente importante”, especialmente a la hora de trabajar de la mano con los otros actores de la industria.
“El hecho de que podamos salir fortalecidas como agencias de viajes también va a ser de la mano de la flexibilización que tengamos con las aerolíneas; para hablar de casos puntuales, en términos de pólizas, de requisitos. Si vamos a seguir con las restricciones de antes, pues más difícil va a ser que las agencias puedan venderle el 60% a las aerolíneas”, afirmó la presidenta.
“Creo que en este tiempo de recogimiento tenemos que reinventarnos. Hace poco decíamos que la tecnología iba a ser disruptiva y claramente el coronavirus fue el disruptivo. Y ahí es donde tenemos que arrancar”, reflexionó.
Finalmente, Cortés Calle señaló que el turista también estará golpeado en sus finanzas, con lo cual “vamos a tener que hacer entre todos el gran esfuerzo de una promoción muy grande a nivel nacional, luego vendrá la de nivel internacional y por supuesto el trabajo grande que tenemos como país es el de volver a traer a esas aerolíneas que ya no están, en un plazo no tan largo”.
Lo que dijo Andrés Uribe
El gerente de la IATA en Colombia reiteró que la actual crisis es la más grave que ha experimentado alguna vez la industria aérea y sus consecuencias no se acercan siquiera a las sufridas en crisis anteriores como el SARS o el 11 de septiembre.
“Hace apenas unas semanas IATA proyectaba que la industria iba a perder unos 29 mil millones de dólares en ingresos. Dos semanas después proyectaba 63 mil millones de dólares en un escenario normal, y 113 mil millones en un escenario severo. Hace menos de una semana ya proyectaba 252 mil millones de dólares de pérdida de ingresos. Este es un escenario bastante grave qué va a cambiar el mapa de las aerolíneas. Si el 11 de septiembre significó algunos cambios drásticos, este va a significar unos cambios todavía más drásticos”, sentenció Uribe.
Posteriormente el experto comentó que de los 170 mil empleos directos que genera la industria aérea en Colombia, alrededor de 27 mil podrían estar en peligro “en el peor escenario si el gobierno no hiciera nada”. Sin embargo, señaló que la buena noticia es que el Gobierno Nacional sí ha hecho bastante y destacó que fue uno de los primeros, sino el primero, en tomar medidas para ayudar a la aviación.
Sin embargo, según manifestó, esta rápida reacción jugó un poco en contra del sector, “porque cuando sacaron las medidas el tamaño del problema era muy diferente al que tenemos ahora, entonces se han quedado un poco cortas”, señaló Uribe. El tamaño del problema, valga aclarar, es un paro total de las operaciones comerciales que posiblemente se vaya a extender más de lo previsto.
Cuestionado sobre el inicio de operaciones, Uribe explicó que la curva de la recuperación no será en forma de “V” como en las anteriores crisis sino que se alargará en el tiempo, toda vez que cualquier recuperación posible hace parte de un entramado global en donde juegan las restricciones de viajes de todos los países.
“La capacidad se recuperará de acuerdo a una situación global (…) comenzará con un 15% y va a ir aumentando paulatinamente. Va a ser una recuperación mucho más plana que nos lleve, posiblemente, hasta final del año para poder restablecerla totalmente”, apuntó.
Posteriormente, en su segunda intervención, el representante de la IATA se refirió concretamente a la necesidad más urgente de las aerolíneas: plata. “Hacen falta unas medidas más grandes para solucionar la liquidez (…) Los gobiernos se tienen que asegurar que las aerolíneas sobrevivan porque cuando empiece la recuperación económica, va a ser una cosa con aerolíneas y otra sin aerolíneas”, manifestó.
¿Qué dijeron las aerolíneas?
Santiago Álvarez, director de Latam Airlines Colombia, hizo un recuento de las acciones tomadas por la compañía, como dejar los saldos abiertos a los pasajeros para que los usen en vuelos futuros.
A nivel interno señaló que la única manera de sobrevivir es “preservando la caja” y en ese sentido la primera medida es cortar cualquier inversión no esencial, esto es, la que no esté directamente relacionado con volver a poner a la aerolínea en marcha.
En segunda medida, la protección del empleo, para lo cual han adelantado conversaciones con todos sus públicos, incluidos los empleados, con quienes se acordó la reducción del 50% de los salarios por los próximos tres meses. Finalmente, destacó los vuelos de repatriación que han llevado de vuelta a sus países a miles de personas.
“Los analistas más optimistas hablan de que la recuperación va a ser en diciembre de 2021. Cuando digo recuperación, me refiero el 100% de lo que teníamos hace tan solo un mes. Esto tendrá una curva ascendente, que será lenta. Esperamos que en diciembre de este año estemos entre un 60-65% de la operación que teníamos”, concluyó Álvarez.
Por su parta Silvia Mosquera, vicepresidenta Comercial de Avianca, señaló que el primer reto es la seguridad de los clientes y empleados. El segundo es hacer gestión en medio de la incertidumbre. “Otro reto muy importante, no solo para las aerolíneas, es mantener la liquidez. Tenemos que ver cómo contener los costos, porque no estamos teniendo ingresos”, señaló.
“El cuarto reto es prepararnos para cuando llegue la recuperación. No sabemos si se va a dar para el 2021; incluso los más pesimistas dicen que para el 2022. De nuevo es una incertidumbre, pero sí que tenemos que estar planteándonos escenarios de recuperación”, afirmó Mosquera.
En cuanto a la relación con los pasajeros, la directiva dijo que la aerolínea ha implementado la flexibilidad para cambiar viajes en el corto plazo pero también medidas para que compren con tranquilidad. “Creamos vouchers o bonos en donde el cliente puede canjear el valor del tiquete. Le damos la opción de volar hasta marzo del 2021”, afirmó la directiva.
Por su parte, la vicepresidenta Comercial de Viva Air, Lisa Mota-Pinto, coincidió en la gravedad de la crisis pero señaló que uno de los desafíos también es mantener el positivismo, “acreditando que Viva Air va a continuar en la industria”.
“Continuamos limpiando a fondo todos los aviones y mejorando los procesos internos. Estamos arreglando la casa para estar listos cuando podamos volar de nuevo”, dijo la directiva.
“Como aerolínea low cost, nuestros costos son bajos y tenemos una flexibilidad que con suerte nos va ayudar a levantarnos fuertes y continuar. Pero este es un problema mundial, de demanda, y la recuperación va a ser gradual. Lo vamos a ver durante 2021 y quizás durante 2022”, apuntó.
Las sugerencias de Jean Claude Bessudo
El empresario, tras aclarar que hablaba a título personal, realizó cuatro propuestas. La primera de ellas se refirió a la creación de mecanismos ágiles y eficientes para la solución de conflictos entre las empresas, previendo el surgimiento de múltiples diferencias a raíz de la actual crisis.
Dado los tiempos prolongados en las instancias de la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC), e inclusive el Comité de Ética de Anato, la recomendación es que el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo (MinComercio) designe unos comités de solución de conflictos establecidos por las asociaciones del sector, destinados a resolver, de forma inmediata e inteligente, todas las posibles diferencias que llegaran a presentarse.
La segunda sugerencia de Bessudo, medio en serio, medio en broma, es el despido de todos los vicepresidentes de reveneu management de las aerolíneas, por considerarlos “sus peores enemigos”. De acuerdo con el empresario, que reconoce que su petición es “de dinosaurio” hay que obligar a las aerolíneas “a ganar plata y a recuperarse de forma equitativa”.
“Yo entregaría la decisión tarifaria al Aeronáutica Civil en un lapso de un año, durante la recuperación”, afirmó, en referencia a la necesidad de intervenir las tarifas y regular el servicio aéreo en el marco de la actual crisis.
“Entiendo su resistencia al intervencionismo, pero la industria aeronáutica es un servicio esencial, sobre todo en un país sin carreteras y con muy mala conectividad interna. Cuando vemos la cantidad de colombianos que no pudieron regresar al país porque los pasajes de Europa a Bogotá costaban 10 y 20 millones de pesos, creo que en esos momentos las tarifas debieron ser reglamentadas e intervenidas. Y no nos sentaría mal por un lapso, mientras se recuperan las aerolíneas”, manifestó.
Bessudo también pidió a las aerolíneas ampliar el lapso de un año para la utilización de los vouchers o bonos, a valores constantes aceptados por todos. Recordó que la Aeronáutica Civil tiene vigencias hasta de dos años para este propósito, con lo cual la recomendación para las aerolíneas es ampliar el plazo mientras la economía se repone.
Finalmente, el empresario recordó que una vez se reactiven los viajes, la mayoría de empleados del país habrá tomado ya sus vacaciones, con lo cual la propuesta para el país es suprimir la mayoría de festivos y juntarlos todos para generar un periodo adicional de vacaciones.