Más de 400 personas acudieron al Sheraton Convention Center de Santiago de Chile para participar de la 13º versión de Wings of Change Americas 2024 (WOCA); un evento en donde se discuten los retos y oportunidades de la industria aérea en la región.
La cita fue el 10 y 11 de abril en Santiago de Chile y congregó a las partes interesadas de la cadena de valor de la industria aérea en la región en una serie de conferencias y paneles especializados. De igual manera, fue una oportunidad para que la IATA reiterara los principales puntos de su agenda global de cara a sus distintos públicos, entre estos, por supuesto, los gobiernos de la región.
En el evento, de hecho, participaron 15 ministerios de turismo y se unieron esfuerzos con ONU Turismo, representada en Wings of Change por Gustavo Santos, director Regional de la entidad y exministro de Turismo y Deportes de Argentina. El directivo de ONU Turismo destacó que es la primera vez que se propicia un espacio en donde representantes gubernamentales de turismo de la región y los directivos de aerolíneas pueden encontrarse.
De ahí la importancia de poner en valor el rol de la aviación en el turismo; un sector económico que, según la metodología expandida del WTTC, representa el 7,9 % del PIB de América Latina y sostiene más de 17 millones de empleos. A su vez, el transporte aéreo es el medio de movilización del 90 % de los turistas en el mundo.
“Estimamos que durante el primer semestre de 2024 la región recibirá un 12 % más de visitantes internacionales comparado con el mismo periodo de 2019 (…) Los años de la pandemia han quedado atrás y el sector turístico de nuestra región se encuentra más fuerte que nunca”, afirmó Peter Cerda vicepresidente Regional de IATA para las Américas, en su intervención.
El directivo señaló que, hasta febrero, el número de rutas en la región han aumentado en un 1,5 % frente al mismo periodo del 2023. Esto se traduce en 46 nuevas rutas, 11 mil frecuencias más y 2,4 millones de plazas adicionales.
Sin embargo, hay una acotación importante, que Cerda no duda en calificar de “impresionante”, de la que probablemente se derivan todas las solicitudes posteriores de la IATA: el 80 % de la población mundial nunca se ha subido a un avión.
“En esta parte del mundo, los ciudadanos sólo realizan, en promedio, 0,65 viajes al año, es decir, aproximadamente un viaje cada dos años. Si lo comparamos, los españoles hacen 4,56 viajes al año y los estadounidenses 2,5”
Peter Cerda, vicepresidente Regional de IATA para las Américas.
Las cuatro prioridades de la IATA
A pesar de que hoy la región está mejor conectada que nunca, el propósito de fondo parece ser expandir los alcances del transporte aéreo a la mayor parte de la población latinoamericana y para ellos hay cuatro prioridades claramente establecidas: (1) Impuestos, tasas y cargos, (2) Marcos normativos, (3) Infraestructura, y (4) Sostenibilidad.
“Este ha sido un difícil y largo debate con los gobiernos de toda la región. El sector no está pidiendo que se le deje libre de impuestos, pero no podemos seguir siendo tratados como la gallina de los huevos de oro. Sobre todo, cuando se estima que las líneas áreas latinoamericanas perderán 1,10 dólares por pasajero en 2024”, aseguró el vicepresidente de la IATA.
Colombia, de hecho, sería un ejemplo de lo que no se debe hacer en materia de impuestos para el sector aerocomercial. “En Colombia las tasas, cargos e impuestos de un vuelo internacional ascienden a casi el 52% del precio de un boleto (…) En Brasil, el combustible de aviación representa, en promedio, 40% de los costes totales de las aerolíneas nacionales (…) En México, se cobra a los pasajeros un impuesto para pagar la deuda del aeropuerto de Texcoco que el gobierno decidió no construir”, ejemplificó el directivo.
Cerda contrastó este hecho con el de que los autobuses, en muchos países de la región, están exentos del IVA, el costo del combustible está subvencionado y no están regidos por estrictos protocolos de seguridad. “¿Por qué las compañías aéreas reciben un trato diferente?”, expresó.
La argumentación de Cerda continuó con el segundo punto, los “marcos normativos”, en el que la queja parece ser la intención de algunos sectores políticos de proteger a los consumidores del transporte aéreo, “a veces de manera excesiva”. En México, por ejemplo, se presentó en el Congreso un proyecto de ley para prohibir la sobreventa de vuelos y en Perú y en Colombia han emergido propuestas para regular las tarifas, indicó. Vuelve entonces la misma pregunta
“¿Porque el transporte aéreo recibe un trato diferente a otros sectores? Un asiento no es simplemente un asiento. Si una persona va a un concierto de música o un partido de Futbol, el precio del asiento en la primera fila es diferente a la gradería. Lo mismo pasa en un avión”
Peter Cerda, vicepresidente Regional de IATA para las Américas.
El representante de la IATA trajo a colación el caso de Brasil, en donde, según él, el aumento de los litigios por daños morales supone una carga importante para la industria, ya que las aerolíneas tienen un promedio de una demanda por cada 227 pasajeros. El caso ideal sería Estados Unidos, en donde se registra una demanda por cada 1,2 millones de pasajeros.
En materia de infraestructura, si bien hay grandes esfuerzos, hace falta más ayuda, dijo el vicepresidente. El caso de México vuelve a la mesa: el AIFA cumplió dos años, pero todavía falta la infraestructura terrestre (carretera/ferrocarril) adecuada que lo conecte al centro de la ciudad. En el AICM, las autoridades deben centrarse en resolver los problemas con las instalaciones y la calidad del servicio. Igualmente en Perú: la nueva terminal debería estar lista a finales de 2024. Pero lo que no estará listo es el acceso al terminal por carretera y transporte público.
Como ejemplos positivos se citó el estudio de capacidad de la IATA en el Aeropuerto El Dorado con la participación de las aerolíneas, Aerocivil y OPAIN, con el objetivo de optimizar las operaciones y su eficiencia; y la nueva terminal del Aeropuerto de Ezeiza en Argentina.
“La industria tiene grandes esperanzas en que el nuevo Gobierno argentino proporcione un mejor entorno operativo para las aerolíneas, fomentando la competencia y trabajando en conjunto con el sector”.
Peter Cerda vicepresidente Regional de IATA para las Américas.
Finalmente, en referencia a la 4ª prioridad, Peter Cerda reiteró el compromiso de alcanzar cero emisiones netas de carbono para 2050, básicamente de la mano de la utilización de combustibles de aviación sostenibles (SAF). “Esta región tiene potencial para convertirse en un importante productor de SAF, pero esto requiere que los gobiernos apliquen las políticas adecuadas y la creación de marcos necesarios para incentivar su producción, similar a lo que se ha hecho en los Estados Unidos”, dijo.
El directivo señaló que la IATA es optimista respecto a la aprobación del programa “Combustible del Futuro en Brasil” y la iniciativa “Vuelo Limpio” en Chile que, de hecho, tuvo un espacio en la agenda de conferencias para profundizar sobre sus alcances.
Luego de esta declaración de prioridades, el evento continuó con conferencias de alto nivel como “Resultados del estudio del MIT sobre la descarbonización de la aviación en América Latina”; ¿Cómo puede la aviación en América Latina alcanzar el cero neto de manera sostenible?; y “Turismo en las Américas: Tendencias y perspectivas de la competitividad global del sector”, con la participación de autoridades turísticas de Chile, República Dominicana, Panamá y Uruguay.