Cuatro exviceministros de turismo dieron sus puntos de vista sobre los retos del sector turístico en Colombia, mientras que líderes gremiales respondieron qué le dirían al oído al presidente Petro en dos minutos como recomendación en materia de turismo.
Pocos sectores se dan el lujo de sentar a sus distintos viceministros en un mismo espacio y esto fue exactamente lo que pasó en Santa Marta el pasado 10 de mayo, cuando los seis viceministros de Turismo que ha tenido el país se sentaron en un mismo espacio en un panel realizado en el 6º Encuentro de la Cadena Turística del Caribe, con la moderación de Gilberto Salcedo, vicepresidente de Turismo de ProColombia. Esto fue lo que dijeron cuatro de los exfuncionarios.
Juan Pablo Franky
El primer viceministro de Turismo del gobierno de Iván Duque enfocó su participación en lo que él llama una transformación completa del sector por cuenta de fuerzas económicas que le son ajenas, pero que lo determinan ¿A qué se refiere? Explica Franky que los hoteles son inmuebles y como inmuebles atienden a una serie de intereses, por ejemplo, de los desarrolladores y constructores, que no están ligados propiamente al turismo pero cuyas inversiones están determinando su desarrollo.
“Tenemos que empezar a entender que lo que hoy tenemos es, muchas veces, el resultado de unas iniciativas empresariales que no están necesariamente ligadas al día a día del turismo (…) fuerzas económicas que nos impactan como turismo pero no nacen con un propósito de desarrollar turismo sino negocios inmobiliarios” afirmó Franky en referencia al crecimiento abrumador de las viviendas turísticas (las viviendas turísticas pasaron 10.855 registros en 2020 a 58.748 en 2023).
El exviceministro explica que desde que empezaron los incentivos fiscales para el desarrollo de la infraestructura hotelera, por allá en el año 2002, las empresas de desarrollo han ido adaptándose a las oportunidades que ofrece el sector, pero ahora el panorama ha cambiado con la inminente finalización del incentivo:
“Por qué crece la vivienda turística? Porque, definitivamente, detrás de eso hay unos intereses de empresas que han entendido que, alrededor de la construcción, pueden vender unos metros cuadrados más costosos que si los venden en un contexto normal de vivienda. Pero, adicionalmente, los desarrolladores han entendido muy bien las dinámicas de lo que está pasando con nuestra población, que envejece, tiene más capacidad adquisitiva y empieza a ver en el concepto de vivienda turística una opción interesante, ya que puede usarla o rentarla”.
“Todos estos cambios están transformando de manera fundamental nuestro sector. (…) Las viviendas turísticas están ahí y llegaron para quedarse (…) ¿Cómo podemos nosotros participar y ordenar esto? Es una de esas discusiones que vale la pena empezar a abordar y a participar de manera más activa en temas como el ordenamiento territorial y reglamentos de propiedad horizontal”.
Franky recomienda, en ese sentido, abordar el desequilibrio fiscal, no solo para tener una competencia más equitativa con la hotelería sino para generar unos recursos nada despreciables para el Ministerio de Hacienda vía el impoconsumo. En conclusión: “Hay que ver cómo reglamentamos e integramos en nuestros planes futuros otras modalidades que hoy son parte del turismo pero que todavía consideramos como si no estuvieran allí”.
Julián Guerrero
Julián Guerrero también ocupó la cartera del Viceministerio de Turismo durante el gobierno de Iván Duque y hoy dirige el programa Destino Naturaleza de USAID, enfocado en la conservación y regeneración de los ecosistemas y comunidades a través del turismo. De ahí que su intervención se haya enfocado en “poner en dedo en la llaga” en lo que, en líneas generales, está ocurriendo en Colombia en materia de sostenibilidad y competitividad y que, según lo que puede concluirse, no es nada satisfactorio a pesar de los avances de los últimos años.
“No podemos venir a decirnos mentiras y cosas agradables para quedar bien y echar un buen discurso. En términos de sostenibilidad el balance es muy agridulce. No hay una apuesta por la sostenibilidad y lo vemos en casos como Playa Blanca en Barú o la depredación del medio ambiente en el Parque Tayrona, además de los problemas de prostitución y proxenetismo en ciudades como Cartagena que son absolutamente insostenibles e inaceptables”, dijo.
“Creo que ha habido una complacencia con la sostenibilidad y la usamos más de nombre. Pero eso, en el 90 % de los casos, es mentira. Así de sencillo“.
Y agregó: “La sostenibilidad dejó de ser filantropía, dejó de ser responsabilidad con las futuras generaciones, dejó de ser ‘abraza árboles’. El vínculo de la sostenibilidad y la competitividad es íntimo y hoy no se puede hablar de un destino competitivo sino incorporamos la sostenibilidad. Creo que el Caribe colombiano está llamado a liderar y a ser ejemplo”, dijo el exfuncionario, quien pareció lamentarse de que Colombia no está aprovechando estos “primeros años del turismo” para evitar cometer los errores de otros destinos.
Las críticas de Guerrero también apuntaron a una falta de visión a largo plazo del Viceministerio de Turismo y que es evidente en los cambios de política y de programas en cada gobierno. Guerrero afirmó, por ejemplo, que el único programa de largo plazo que conoce es “Colegios Amigos del Turismo”.
“No nos hemos dado la oportunidad realmente de pensar cómo se sueña Colombia en materia de turismo en 50 años. Simplemente llega el gobierno de turno con su proyecto debajo del brazo —incluido el que participé— y lo saca adelante bien, regular o mal”.
Sobre las instancias de gobernanza turística, señaló que sí existen pero no se usan o, quizás se usan mal: “los viceministros terminamos haciendo las reuniones del Consejo Consultivo a las carreras, porque la ley nos obliga, pero no se llevan los temas sustanciales porque esos se discuten en un pequeño comité de cuatro o cinco personas que decide lo que se va a hacer”.
Finalmente, Guerrero enfatizó en que es falsa la división tajante entre lo público y lo privado que suele formularse para hablar de política turística: “para sacar las políticas y proyectos de país adelante, se necesita el trabajo articulado de los dos”.
“Hay que dejar de ver algo gobierno como un proveedor de servicios y fuente de financiación de proyectos. Estoy convencido de que un elemento esencial es entender que los privados tienen una inmensa responsabilidad pública y tienen que asumirla; los gremios y prestadores de servicios turísticos deben de dejar de pensar cómo sacan el mejor provecho para su interés particular de su subsector del turismo y pensar en lo público”, concluyó.
Oscar Rueda
Para el primer viceministro de Turismo de Colombia el turismo suele innovar mucho en términos y palabrejas, pero en esencia, los temas grandes son los mismos. Para Rueda, turismo sostenible es redundante porque todo el turismo debe ser sostenible por definición y, asimismo, “gobernanza” no es otra cosa que la suma de lo público, lo privado, la academia, etc.; una condición que debe ser inherente al desarrollo turístico, porque los principales valores del sector, tangibles o intangibles, son públicos: por ejemplo, seguridad, promoción, playas, etc.
La palabra clave de rueda, entonces, es “interacción”, tanto entre lo público y lo privado como entre lo nacional y lo regional y para ello es necesario valerse de mecanismos institucionales para que esa interacción sea obligatoria y, sobre todo, determinante —por ejemplo, el caso del Consejo Consultivo de Turismo—. Ahora bien ¿hacia dónde debe orientarse esa interacción?
“Nos preocupa mucho la política y escribir la estrategia y eso está bien. Pero no podemos cambiar la política cada vez que se cambia un viceministro. Pueden hacerse ajustes, pero la política debe ser como la constitución. Lo que sí hay que estar revisando es el plan de acción. Es lo último que se hace, pero es lo primero que debemos hacer. No hay que hacerle seguimiento a la política, hay que hacerle seguimiento al plan de acción”, manifestó.
Sandra Howard
La exviceministra de Turismo durante buena parte de los dos gobiernos de Juan Manuel Santos se expresó en dos sentidos fundamentales. En materia de recomendaciones al gobierno, hizo un llamado a simplificar los procesos y “no buscarle un problema a cada solución”, en referencia a ciertos requisitos y certificaciones que hoy en día, más que una guía, están siendo una talanquera para que un establecimiento o empresario se acoja a los beneficios o formalidades que exige el sector.
En segunda instancia, Howard tocó un tema de fondo que no en pocas ocasiones rompe la gobernanza del turismo y es la desconexión entre la mirada de quienes representan lo público y quienes representan las comunidades.
“Mientras los funcionarios se sientan a planificar el turismo, en el Caribe por ejemplo, y lo proyectan como un destino de talla mundial y una joya a nivel de competitividad, la gente en las regiones está viendo como resuelve su seguridad alimentaria o cómo tiene agua potable en su casa. Si esas dos visiones no se armonizan va a ser muy difícil tener una verdadera gobernanza turística porque yo no puedo hacer turismo de talla mundial cuando mis desperdicios están yéndose al mismo río que va luego a darle la playa a donde pretendo llevar a mis turistas (…) Entonces empecemos a trabajar con las comunidades y ver en dónde están sus prioridades”, apuntó.
Los gremios, al oído del presidente
Además del panel de exviceministros, el 6º Encuentro también congregó a los principales gremios del turismo en torno a un panel que culminó con la siguiente pregunta: Si tuvieran la oportunidad de hablarle al oído al presidente Petro, qué le dirían para que el turismo pueda, efectivamente, reemplazar los ingresos del petróleo.
“Le hablaría de gobernanza. Él debería bajar más a temas específicos su intención y su ilusión de crecer el turismo. Tenemos un Plan Sectorial y yo no veo que sea trabajado con las gobernaciones y las alcaldías para que realmente exista una cohesión y un trabajo conjunto público privado. Le diría que el punto número uno para uno escoger un destino turístico es la seguridad y la seguridad hay que trabajarla, cuidarla y no estamos viendo que eso pase. Realmente, como empresarios del sector turístico no hablamos tanto de ese tema en los medios de comunicación porque podríamos ahondar más la problemática. Y tercero, le hablaría de la formalidad. Creo que la política de la economía popular puede ser acompañada por el sector turístico, pero tiene que ser formal. No puede haber una diferencia entre los que pagan impuestos y los que no”, afirmó Paula Cortés Calle, presidente de Anato.
A su turno, José Andrés Duarte, presidente de Cotelco, señaló: “Simplemente le reiteraríamos que este es un sector aliado para la agenda de desarrollo en las regiones, que genera empleo e impacta de manera positiva, en muchas oportunidades, a las mujeres y los jóvenes. Por eso hay que invitarlo a revisar lo que está ocurriendo en el sector, que aunque crece en términos de turismo internacional, no compensa la relevancia del turismo doméstico. El dato más diciente es que en 2023 el PIB de alojamiento y servicios de comida cayó 5,4 %. (…) Importantísimo invitarlo a la reflexión sobre cómo logramos un trabajo en equipo con las autoridades locales para resolver los problemas del crecimiento sin control. El RNT se tiene que revisar; debe tener condiciones justas para que realmente protejamos el crecimiento de este sector”.
Por su parte, Paula Bernal, gerente de IATA Colombia, dijo: “Los destinos turísticos dependen del turismo doméstico y este se contrajo mucho el año pasado por el incremento del IVA y del combustible de aviación. Entonces, la primera recomendación al oído es que nos acompañe en la iniciativa de bajar el IVA a los tiquetes aéreos; hoy hay seis proyectos de ley en el Congreso en ese sentido. También hay que desmitificar esa idea de que el sector aéreo es para ricos. No es así. El 75 % de los usuarios del transporte aéreo en Colombia son estratos 2 y 3 entonces este sector no debería tener la carga tributaria que tiene. Por último, seguir trabajando en un ambiente público privado.
“Los tiquetes en Colombia han bajado 17 % en lo corrido del año y yo quisiera que el gobierno nos acompañara a comunicar ese logro, porque ha sido un esfuerzo grande que ha hecho el sector privado”.
Paula Bernal, gerente de IATA Colombia.
Laura Durana, directora de Acotur, afirmó: “Hay dos temas fundamentales. Primero, la seguridad. Los empresarios creen que no estamos de acuerdo con ellos, pero si sacamos un comunicado conjunto sobre este tema, puede ser contraproducente para la demanda. Sin embargo, estamos en jaque. Segundo, las conectividad, no solo la aérea y terrestre, sino también las telecomunicaciones. Hay medio país en la selva absolutamente desconectado”.
Finalmente, Ángela Diaz, directora de Acolap, concluyó: “No sentimos que haya una correspondencia con ese sueño de hacer del turismo un reemplazo del petróleo. Primero, hay que poner el país un poco más en orden. Para que el turismo sea ese generador económico por encima del petróleo necesitamos seguridad y que volvamos a recuperar la confianza en una cantidad de escenarios que habíamos ganado y que hoy se están perdiendo”.