La Aerocivil y el Ministerio de Transporte no aprobaron la alianza entre Avianca y Viva Air al considerar que podría derivar en una vulneración a la libre competencia. Te explicamos las razones de esta decisión.
La determinación se dio a conocer este 8 de noviembre tras un análisis realizado por un equipo técnico y jurídico constituido para evaluar la solicitud de integración de dichos operadores de transporte comercial regular. Tras esta evaluación, la Aerocivil concluyó que “la integración representa riesgos para la competencia en el sector y el bienestar de los consumidores”.
“Según la ley aplicable, la Aerocivil tiene la obligación de objetar las operaciones de integración que puedan afectar la competencia en el mercado, creen o refuercen posiciones de dominio y puedan perjudicar a los consumidores”, aseveró la entidad.
¿Por qué la Aerocivil negó la integración?
El análisis siguió las prácticas recomendadas e implementadas por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), la Red Internacional de Competencia (ICN, por sus siglas en inglés), la Dirección General de Competencia de la Comisión Europea, el Departamento de Justicia de los Estados Unidos, la Federal Trade Commission y la Superintendencia de Industria y Comercio de Colombia.
Gracias a esto, las entidades concluyeron que esta integración significaría que las dos compañías “participan en 59 rutas nacionales, que movilizan el 93.7% del tráfico domestico del país. De estas rutas, en 29 rutas nacionales round trip participan de manera coincidente”.
Asimismo, de darse esta unión, el ente integrado alcanzaría el 100 % de la participación en 16 rutas nacionales. En términos de libre competencia, la Aerocivil señala que Viva desaparecería como un competidor independiente, lo que significaría nuevas dificultades de crecimiento o incursión en nuevos mercados para los otros competidores. Como consecuencia, la alianza significaría volver a niveles que no se veían en el país desde hace más de siete años.
Los consumidores podrían verse perjudicados en la medida en que el ente integrado (Avianca, Viva Air y Viv a Perú) tendría más facilidades, incentivos y menores riesgos al aumentar sus precios, reducir frecuencias, cancelar rutas o reducir servicios complementarios, entre otros.
Efectos adversos sin remedios
Según los parámetros establecidos por la ley, una integración empresarial como la proyectada por las aerolíneas solo podría aceptarse bajo dos escenarios:
- Que las empresas propongan -bajo aprobación de la Aerocivil-, remedios y compromisos, llamados condicionamientos, que identifiquen y aíslen o eliminen los efectos anticompetitivos de la integración de forma que la integración no afecte la estructura competitiva del mercado.
- Que se prueben que se configura la excepción de empresa en crisis.
Frente al primer escenario, las empresas “no ofrecieron remedios; de hecho, solicitaron que la transacción fuera aprobada de forma expedita e integral, aplicando la excepción de empresa en crisis”. Asimismo, las aerolíneas tampoco probaron que el daño a la competencia generado por la transacción era menor que aquel que provocaría la salida del mercado de Viva.
Frente a la segunda condición, la Aerocivil pudo comprobar que Viva, efectivamente, sí afronta una situación financiera relevante. Sin embargo, la aerolínea no pudo probar que “la crisis económica de Viva sea de tal magnitud que afecte su viabilidad en el mercado y, por consiguiente, esté condenada a salir del mercado de manera inminente e inevitable”.
Adicionalmente, la entidad destaca que Viva no probó haber explorado y agotado alternativas diferentes a la integración: “en el expediente no reposan pruebas que acrediten que Viva solicitó préstamos a entidades financieras y/o envió ofertas a posibles compradores como fondos de inversión o grupos de inversionistas”.
Viva responde
La Aeronáutica cierra la comunicación recomendándole a Viva que “que adopte las medidas internas y alternas pertinentes con el fin de superar la situación financiera que afronta actualmente”.
Ante la decisión anunciada por las entidades, Viva aseguró que recibe con sorpresa la decisión tomada por la Aeronátuica Civil, dado que la alianza entre ambas compañías “hubiera constituido un respaldo a la continuidad del Modelo de Bajo Costo en la región”.
Además, aseguró que revisarán las alternativas presentadas por la autoridad aeronáutica “dado que esta alianza es necesaria para la continuidad de Viva, para seguir potenciando la conectividad aérea del país a precios bajos y mantener la fuente de trabajo de los más de 5.000 colaboradores directos e indirectos”.
Finalmente, la aerolínea aseguró que seguirán operando como lo han hecho a lo largo de diez años, manteniendo su compromiso de promover la inclusión aérea en Colombia y la región.