El 2023 empezó con el peso colombiano como la moneda más revaluada entre las principales economías latinoamericanas, destacó el gremio de agencias de viajes.
Aunque durante 2022 Colombia experimentó una fuerte devaluación, este año inició con una corrección y estabilización de la tasa de cambio que resulta positiva para quitarle presión a la inflación actual.
El riesgo de recesión mundial aún no se ha materializado y los resultados más optimistas entre los esperados en la economía estadounidense han hecho que el dólar pierda fuerza y se mire hacia los mercados emergentes, destacó Anato en un comunicado.
“La alta fluctuación del dólar generaba un ambiente de incertidumbre que afectaba los precios de los productos y servicios, así como la oferta y capacidades de negociación con proveedores internacionales, por lo que vemos muy favorable una estabilización de la tasa de cambio con variaciones más moderadas”
Paula Cortés Calle, presidenta de Anato.
De acuerdo con el gremio, el 2023 empezó con el peso colombiano como la moneda más revaluada entre las principales economías latinoamericanas, con un 5,6%. Detrás estuvo el peso chileno, el peso mexicano y el real brasileño.
Este comportamiento seguiría incentivando los viajes de los colombianos al exterior y brindando condiciones más favorables para el turismo emisivo, que en 2022 cerró con un crecimiento del 10% en el flujo de colombianos al exterior.
Sin embargo, a pesar de la pérdida de fuerza del dólar, Colombia sigue siendo atractiva para los visitantes extranjeros, ya que en términos de devaluación anual, el peso colombiano se ubica segundo (13,4%), detrás de Argentina, como la moneda más devaluada.