Un matrimonio, esta es quizá la mejor manera de describir la nueva alianza entre Delta y Latam. Tras seis meses de conversaciones, las aerolíneas formalizaron públicamente su Joint Venture y dieron a conocer algunas de sus implicaciones. Te contamos en qué consiste esta figura y cómo influirá en las operaciones de ambas compañías.
Después de más de tres años de negociaciones y gestiones, Latam Airlines y Delta Air Lines recibieron la aprobación gubernamental para continuar con su Joint Venture en septiembre de 2022. Desde entonces, las compañías han llevado a cabo numerosas reuniones para decidir los pormenores de este “matrimonio”. Finalmente, el pasado 28 de marzo, realizaron la presentación oficial en Colombia de la que podría ser la alianza aérea más importante entre Suramérica y Estados Unidos.
“Estamos anunciando el Joint Venture Delta-Latam. Llevamos más de tres años en este proceso, y, finalmente, hemos concretado la alianza más importante de las Américas para conectar a Suramérica con Norteamérica. Trabajaremos conjuntamente como si fuéramos uno solo y esto nos trae oportunidades inmensas de crecimiento”, aseguró Santiago Álvarez, director de Latam Colombia, en un coctel con sus principales aliados para presentar esta alianza.
Con motivo de esta presentación oficial, directivos de Delta Air Lines visitaron Colombia. En su paso por el país participaron en reuniones con el personal de aeropuerto de ambas aerolíneas, encuentros con el trade y otras actividades. El objetivo fue articular ideas para no solo anunciar esta alianza, sino también generar una mejor experiencia para empleados y clientes. Los primeros resultados de este Joint Venture se verán desde julio.
“Este es el mayor Joint Venture que existe entre Estados Unidos y el mercado suramericano, el número uno”.
Alain Bellemare, President-International de Delta Air Lines
¿Qué es un Joint Venture?
En la industria aérea existen diferentes tipos de acuerdos. El espectro abarca desde los acuerdos de código compartido y las alianzas hasta las fusiones. En este caso, un Joint Venture es lo más cercano a una fusión, sin necesidad de que una de las compañías pierda su marca. Una forma de describirlo es un matrimonio: Delta y Latam conservarán sus marcas y sus valores corporativos, pero aprovecharán los beneficios de la otra, articularán sus servicios y tecnología y trabajarán en conjunto para la expansión de su red de rutas.
“De cara al público, nada va a cambiar. La marca de Delta y Latam es muy fuerte en los destinos que opera. Nuestra meta es crear una propuesta en donde uno más uno sea más que dos. Y lo haremos aprovechando las fortalezas conjuntas de las marcas y de sus posiciones en los mercados”,
Alex Antilla, vicepresidente para Latinoamérica de Delta Air Lines.
Joint Venture Delta-Latam: más que unir rutas
La primera gran noticia anunciada como resultado de este “matrimonio” es la apertura de tres nuevas rutas: Bogotá-Orlando (en julio), Los Angeles-Sao Pablo (en agosto) y Nueva York-Rio de Janeiro (en diciembre). Estas rutas son posibles gracias a que, con esta unión, se fortalece la capacidad de venta de los vuelos en ambos trayectos. Sin embargo, los directivos de Delta y Latam se enorgullecen en anunciar que la llegada de nuevos vuelos es tan solo el comienzo de esta unión.
“Dado que ahora tenemos la capacidad de hablar sobre cómo se maneja el negocio, hemos estado tratando aspectos diferentes. No solo hablamos de vuelos, sino también de tecnología y de operaciones. Si un cliente compra un boleto en Latam y resulta que el vuelo es operado por Delta, queremos que el cliente pueda ir al mostrador o la aplicación de Latam y gestionar lo que necesite en ambas aerolíneas. También estamos hablando de cómo logramos que los clientes obtengan una experiencia que valoran en Delta, si prefieren Latam o viceversa”, explicó Rahsaan Johnson, director de Comunicaciones Internacionales de Delta Air Lines.
Entre otras, el Joint Venture Delta-Latam permitirá:
- Conectividad perfecta entre los más de 100 destinos a los que opera Latam en Suramérica y los más de 300 destinos en Norteamérica a los que opera Delta.
- Vender trayectos completos entre Suramérica y Norteamérica con Delta o Latam como si fueran una sola aerolínea.
- Acercar las puertas de embarque y los salones VIP de Delta y Latam para facilitar el transito de pasajeros.
- El equipo de ambas aerolíneas se articulará para brindar los mismos estándares de servicio y lograr un trabajo en equipo ambas aerolíneas.
- Unir los programas de fidelización.
- Aprovechar las mejores prácticas de las compañías. Tal y como explica Alex Antilla: “Podemos compartir esas buenas prácticas. Un gran ejemplo es que Latam está muy avanzada en sus esfuerzos de sustentabilidad, algo en lo que queremos mejorar más. Por nuestra parte, ofrecemos servicios como wifi a bordo, algo que podría incorporar Latam a futuro”.
“Estamos muy felices de poder unir las fortalezas de ambas aerolíneas. Latam como líder en Sudamérica y Delta como líder en EE.UU. estamos seguros que como esta alianza estamos construyendo la mejor red de las Américas”,
Santiago Álvarez.