Esta ley permite a las comunidades de copropietarios tener más control sobre los alquileres de corta duración en sus edificios y, así mismo, busca mantener un equilibrio en la competencia con el sector hotelero.
El Senado y la Asamblea Nacional de Francia han aprobado una nueva ley que otorga a las ciudades más herramientas para regular y limitar los alquileres turísticos de corta duración, por ejemplo, los ofrecidos a través de plataformas como Airbnb. La medida, que ha sido respaldada por las dos Cámaras del Parlamento, busca proteger el acceso a la vivienda en áreas con alta demanda residencial y, así mismo, mantener un equilibrio en la competencia con el sector hotelero.
Con esta nueva legislación, las autoridades locales podrán restringir el número de alquileres turísticos en zonas donde la escasez de viviendas es más acentuada, lo que contribuirá a aliviar la presión sobre el mercado inmobiliario. Además, la ley elimina los incentivos fiscales que anteriormente motivaban a los propietarios a convertir propiedades residenciales en alquileres turísticos, lo que distorsionaba el equilibrio del mercado de vivienda.
Patrick Hayat, presidente de la Asociación de Profesionales del Turismo (AToP), destacó la importancia de la nueva legislación y agradeció a los parlamentarios su esfuerzo interpartidista para elaborar un proyecto de ley equilibrado. “Se trata de una legislación que responde a las necesidades de las comunidades y previene los abusos, sin poner en peligro la economía colaborativa real”. Además, indicó que desde AToP le harán seguimiento a la implementación de la ley, que pasará por fases de reglamentación y aprobación de decretos para que los municipios puedan aplicar los nuevos mecanismos.
Uno de los puntos más destacados de la ley es que permite a las comunidades de copropietarios tener más control sobre los alquileres de corta duración en sus edificios, otorgándoles la capacidad de imponer restricciones o limitaciones. También se incluye a los “meublés de tourisme” (alquileres vacacionales amueblados) en la normativa, buscando que estos alojamientos cumplan con las normativas de eficiencia energética y no contribuyan al deterioro medioambiental.
