La inteligencia artificial ha revolucionado la manera en que consumidores y vendedores encuentran viajes. Presentamos una introducción a esta funcionalidad para estar a la vanguardia tecnológica.
Si existe un campo de la tecnología que ha sido completamente revolucionado por la inteligencia artificial (IA), es el de las búsquedas. Atrás quedaron los días de palabras sueltas en Google que arrojan millones de resultados y exigen una gran cantidad de tiempo y esfuerzo para interpretarlos. Por el contrario, un buscador potenciado por IA es capaz de entender preguntas y términos de búsqueda complejos, y de arrojar resultados simplificados y sintetizados en segundos.
Las empresas líderes del mercado tecnológico saben bien que la forma en que los usuarios exploran el ciberespacio está cambiando a pasos acelerados. No en vano, los buscadores más populares del mundo, como Google o Bing, ya han incorporado IA en sus motores de búsqueda y navegadores de internet. De ahí que la industria de los viajes haya hecho lo propio: sitios web líderes del sector, como Tripadvisor o Booking.com, ya han integrado IA en sus motores de búsqueda.
Dada esta situación, todas las agencias de viajes, desde la pequeña freelancer hasta la más grande de las OTA, pueden y deben implementar esta tecnología en sus operaciones cotidianas, en ocasiones, incluso a costo cero. ¿Cómo estar a la vanguardia en búsquedas de viajes con IA?
Un producto turístico de nueva generación
Al momento de iniciar la planeación de un viaje, clientes y vendedores se enfrentan al mismo primer obstáculo: una barra de búsqueda vacía. El usuario introduce un destino en el buscador y, posteriormente, usa filtros y tiempo para curar el contenido, construir el viaje y comprar los productos necesarios. En contraste, un buscador de viajes potenciado por IA provee una experiencia diametralmente distinta.
La IA tiene la capacidad de entender comandos de búsqueda (o prompts) mucho más complejos que el nombre de un destino. Así, en lugar de escribir: “Vuelos a Europa”, es posible preguntar: “Encuentra el vuelo más barato a Europa desde Bogotá en el primer semestre del próximo año para una familia de dos niños y dos adultos”. La respuesta, lejos de ser un listado tradicional de resultados, es un texto simple que sintetiza las mejores alternativas e, incluso, ofrece enlaces a los sitios donde se pueden comprar esos tiquetes.
La búsqueda ayuda a encontrar, de manera eficaz, prácticamente todos los componentes de un paquete turístico:
- Vuelos: Como ya hemos dicho, la IA puede agregar el contenido de miles de metabuscadores en cuestión de segundos, para encontrar la mejor oferta delimitando rutas, tarifas, tiempo de viaje, fechas, entre otros.
- Alojamiento: Además de los filtros habituales, la IA tiene la capacidad de entender prompts relacionados con la ubicación de las propiedades, su proximidad a los atractivos turísticos, accesibilidad, amenidades, etc.
- Itinerarios: Una IA puede generar varios itinerarios tras el envío de prompts como: “¿Cuál es el mejor itinerario de cinco días en Nueva York gastando menos de $200 al día por persona?”. La IA se convierte en el mejor experto en todos los destinos del mundo.
¿Cómo puede un agente de viajes hacer uso de la búsqueda de viajes con IA?
Algunos expertos han señalado la capacidad de la IA de sintetizar grandes volúmenes de información como su habilidad más relevante en la actualidad por su uso inmediato en el análisis de datos, relevantes tanto para la planeación de viajes como para el desarrollo de estrategias de negocio y de marketing. Sin embargo, todavía hay diferentes aspectos por resolver para que proporcione recomendaciones de alta calidad de manera consistente.
Sin embargo, a pesar de las falencias que todavía tiene esta tecnología, es claro que ya está al servicio de los agentes de viajes y puede facilitarles su proceso de construcción de producto, al permitirle ensamblar paquetes según las necesidades del cliente en tiempo récord. Además de arrojar resultados específicos, una búsqueda con IA puede agregar información para indicar cuál es el mejor tiempo para comprar, emitir recomendaciones para visitar un destino e, incluso, generar contenido en texto o imágenes para mercadear la venta. Uno de sus principales beneficios, sin embargo, es la posibilidad de ofrecer mayores beneficios potenciales que generen más satisfacción del cliente.
Si un vendedor pasa menos tiempo construyendo el producto, puede invertir más esfuerzo en fortalecer sus relaciones comerciales, adquirir nuevos clientes y cerrar más negocios con ellos. Estas son capacidades que la IA, al menos por el momento, no posee. De cara a los empresarios, implica un ahorro de costos y mejora de productividad considerablemente atractivas.
Soluciones de IA costo cero
Microsoft fue el primero de los gigantes tecnológicos en incorporar un componente de IA en su buscador y navegador web de manera gratuita para todos los usuarios a través de Copilot, ya disponible en Edge y Bing. Alphabet hizo lo propio con Gemini, su versión de IA, incorporada en Google. Meta, por su parte, ya agregó Meta AI a WhatsApp, Facebook e Instagram.
ChatGPT, la IA más robusta y desarrollada de la actualidad, ya desarrolló su sitio web de código abierto para uso libre e, incluso, una extensión para navegadores que funciona como un motor de búsqueda incorporado a toda la experiencia de exploración del ciberespacio.