La compañía de cruceros anunció una estrategia global a largo plazo con el objetivo de ser carbono neutro. El proyecto incluye investigación tecnológica, exploración de combustibles alternativos y un programa voluntario de compensación de carbono.
Este plan de acción climática a largo plazo tiene el objetivo de reducir el impacto en el medio ambiente de NCL para poder convertirse en una empresa carbono neutro. Para ello, se han planteado tres áreas estratégicas: reducir la intensidad de carbono, identificar e invertir en tecnología e implementar un programa de compensación de carbono.
Frente a esta última área de acción, Norwegian anunció que, a partir de este año, compensará tres millones de toneladas métricas de dióxido de carbono durante tres años para ayudar a cerrar la brecha en sus esfuerzos de descarbonización hasta que haya nueva tecnología disponible. Este programa será en colaboración con World Kinect Energy Services, la división de sustentabilidad de World Fuel Services.
“Nuestro compromiso de comprar tres millones de toneladas métricas de créditos de carbono es un paso medible en la reducción de emisiones a corto plazo que nos permite tomar medidas hoy y ayuda a cerrar la brecha en nuestros esfuerzos de descarbonización mientras nos preparamos para un futuro con bajas emisiones de carbono”, Explicó Frank Del Rio, Presidente de Norwegian Cruises Line Holdings.
Asimismo, invertirá en nuevas tecnologías que ayuden a reducir el consumo de combustible por día. Esta decisión lleva ya algunos años en curso y ha logrado una reducción del consumo por día de aproximadamente un 17% de 2008 a 2019 para toda la flota. Además, logró una reducción de cerca del 14% en las emisiones de CO2 por día entre 2015 y 2019. NCL espera que esta última la tasa disminuya aún más a medida que se introduzcan en la flota nueve buques más eficientes en combustible hasta 2027.
Finalmente, Norwegian se asoció con la CLIA y otras organizaciones marítimas para proponer el establecimiento de un fondo colaborativo de investigación dedicado a eliminar las emisiones de CO2 del transporte marítimo internacional. Estos fondos se utilizarán para financiar el desarrollo de tecnologías de propulsión y combustibles de GEI cero o casi cero.