Todo parece indicar que las fiestas de fin de año en la Unión Europea estarán marcadas por los confinamientos y las restricciones de viajes más severas para frenar la expansión de la variante ómicron. Ante este panorama, el WTTC ha recordado que este tipo de medidas son inefectivas y perjudiciales.

A pocos días de Navidad, los países europeos han vuelto a recurrir a las medidas más severas de viajes con la esperanza de frenar la expansión de la variante ómicron. Vetos a la llegada de pasajeros de algunos países, a ciudadanos no vacunados, exigencia de pruebas negativos y confinamientos son algunas de las nuevas medidas decretadas.

Alemania, por ejemplo, volvió a cerrarse a los ciudadanos procedentes de Reino Unido, Francia, Dinamarca, Noruega y Líbano ante la rápida dispersión de esta variante. El país anunció que solo ciudadanos alemanes o extranjeros residentes en Alemania podrán entrar en el país si proceden de alguno de estos países, y deberán contar con una prueba de covid-19 negativa y guardar cuarentena durante dos semanas, sin importar el estatus de vacunación. 

Francia, por su parte, también ha implementado nuevas restricciones hacia reino Unido. Todos los viajeros que provengan de este país y no estén vacunados deberán argumentar razones de peso para viajar al país, y deberán realizarse una prueba PCR o de antígenos 24 horas antes del viaje. Además deberán aislarse a su llegada.

Por su parte, Países Bajos ha implementado un nuevo confinamiento estricto en todo el país desde el pasado 19 de diciembre y que estará vigente hasta el 14 de enero. La hostelería, cultura, escuelas, universidades, deportes y tiendas no esenciales se han cerrado.

Una medida similar está considerando Reino Unido. La semana pasada se registraron 90 mil casos de covid-19, por lo que Savid Javid, ministro de Sanidad del país, informó que están considerando implementar un confinamiento de dos semanas, que incluirían la prohibición de juntarse en interiores, excepto por motivos de trabajo, y limitaría el acceso a los restaurantes y pubs.

Por su parte, Italia reintrodujo la obligación de presentar una prueba negativa del coronavirus a todos los viajeros llegados de países de la Unión Europea (UE). Los no vacunados, además del test, deberán cumplir una cuarentena de cinco días. Y Grecia también volvió a implementar el requisito de presentar una PCR negativa o un test rápido realizados 72 y 24 horas antes de entrar al país.

La WTTC se pronuncia

Julia Simpson, presidenta y directora ejecutiva de WTTC, insór a los gobiernos de la UE a no volver a introducir restricciones de viaje dañinas e ineficaces:  “Imponer prohibiciones de viaje es ilógico. Los viajeros completamente vacunados deben poder moverse libremente“.

“La Organización Mundial de la Salud dice que cerrar fronteras no funciona. Omicron ya está bien establecido en toda Europa. Este es un acto de superación política decidido por personas cuyos medios de vida no dependen de los viajes y el turismo”.