Los guías de turismo de la ciudad realizaron una protesta para manifestar su descontento por la falta de garantías para ejercer su labor. Según aseguraron, no les están permitiendo acercarse a los turistas y las empresas están acaparando el mercado.
Un grupo de guías turísticos de Cartagena realizaron una protesta el pasado martes 8 de febrero a las afueras de la Sociedad Portuaria para exigir “garantías laborales”. Las personas aseguraron que desde el puerto no los dejan desempeñar su labor y están exigiendo a la Alcaldía de la ciudad soluciones.
“Aquí estamos sentados en el Puerto de Cartagena. Desde la mañana llegamos a trabajar y no hemos podido hacerlo. Somos más de 150 guías que estamos esperando, pero no nos dan oportunidad. Gastamos pasajes, almuerzo y no llevamos nada a casa”, aseguró uno de los guías para el diario El Universal.
La protesta se llevó a cabo por los guías que trabajan de manera independiente, quienes aseguraron que están pasando por una situación crítica. Según explicaron, tradicionalmente y según normaas internacionales, a ellos les correspondía el 30% de los turistas que llegan al puerto, y el otro 70% es para las empresas. Sin embargo, hoy en día no les están permitiendo acercarse a los turistas.
“Tenemos dificultades para desempeñar nuestra labor. Somos guías con muchos años de experiencia y capacitados, pero no nos dejan acercarnos a los turistas cuando se bajan de los cruceros, como lo hacíamos antes. Ahora lo que hacen es dejar ingresar a unos buses y ellos se llevan todos los turistas”, comentó Abelardo Urruchurtu, líder de los guías para El Universal.
“No estamos percibiendo el dinero que recibíamos antes, además de eso confabulado por la Sociedad Portuaria con los buses de City Sigthseeing, quienes ahora también tienen buses blancos de servicio escolar, se están llevando el 30% de los turistas que nos correspondían a nosotros”, aclaró.
El gremio manifestó que esta situación creció en pandemia y en plena reactivación del turismo desde la recalada de cruceros a la ciudad. “Esto fue más que todo desde el 27 de diciembre y el primero de febrero cuando llegaron los tres barcos y ningún guía trabajó“, explicó.