Tanto en la visión plasmada en el plan de gobierno de Gustavo Petro como en los objetivos que se traza para el sector Rodolfo Hernández, hay un gran ausente: el conocimiento de las problemáticas y necesidades de la industria turística.
Avanza un nuevo y decisivo momento político en el país y es tiempo de dar una mirada a lo que del turismo se dice en el programa de gobierno del candidato presidencial Rodolfo Hernández. Tal como ocurre con Gustavo Petro, el planteamiento de una política turística clara se encuentra ausente en el plan de Hernández.
Una primera aproximación con el sector, aunque muy mínima, se dio el pasado 24 de mayo en el marco de las reuniones del Consejo Gremial Nacional con los candidatos presidenciales. De esta reunión participó la presidenta de Anato, Paula Cortés Calle, como uno de los gremios que, junto a Cotelco, representan al turismo en este foro económico. El espacio, sin embargo, no fue el propicio ni el indicado para abordar asuntos de política turística con el candidato. “Fue un tiempo muy corto y se dedicó básicamente a contar cómo sería su gobierno, que no es más que lo que ha informado públicamente. Sobre el turismo, planteamos la importancia de los tres ejes que hemos establecido en nuestra visión del turismo (Institucionalidad, legislación y competitividad). Frente a ello, él se comprometió a revisarlo y a brindar un apoyo a la formalidad del sector”, contó Cortés Calle sobre la reunión con Hernández.
La informalidad en el turismo, sin embargo, no aparece por ningún lado en el apartado de turismo del candidato ni tampoco en el de Petro. Esta aparente lejanía con quienes pueden convertirse en el próximo presidente de Colombia es lo que se buscó enmendar con la invitación que el sector turístico en pleno, representado por diez gremios en el Consejo Turístico Colombiano, hizo tanto a Hernández como a Gustavo Petro, para hablar de turismo. No obstante, no se obtuvo respuesta alguna de los candidatos.
El turismo en el plan de Hernández
El documento consta de 76 páginas en donde se presentan cinco frentes de acción y 35 ejes temáticos. Concretamente, el turismo está dentro del segundo frente de acción, “Una Colombia a la altura del siglo XXI”, referente a las propuestas para el desarrollo económico y social y en donde se plantea un diagnóstico bastante somero del sector. En líneas generales, parte de reconocer que el turismo “era una cosa antes de la firma del Acuerdo de Paz con las FARC y otra después”. En ese sentido, señala que este “renglón industrial es clave para el desarrollo del país y debe ser una gran apuesta económica”, ya que “en medio de la crisis ambiental que representa el cambio climático, el turismo es una de las actividades menos contaminantes”.
EREn nuestro gobierno se concertará con las aerolíneas una reducción importante del valor de los tiquetes
El diagnóstico del sector se circunscribe a dos factores: la afectación que causó y causa aún la pandemia y los retrocesos en seguridad. Sobre este último punto, señala el documento: “Colombia ha retrocedido en materia de seguridad y los temores que tenían los turistas antes de la firma del Acuerdo de Paz se han vuelto a presentar”. Son estos factores los que dificultan hoy el aprovechamiento de una oferta turística que el plan define como interminable: playas, selvas, montañas, turismo ecológico, de deportes de alto riesgo y aventura, de avistamiento de aves, al igual que de salud y de congresos y convenciones, destaca el documento.
Dicho esto, se plantean los siguientes objetivos:
- Estructurar una política de turismo innovador (experiencial): gastronómico, salud, medicina estética, industrial, en productos de origen. Esta iniciativa estará articulada con las acciones para la protección del medio ambiente, lo cual resulta más atractivo para el viajero internacional y representa un valor agregado de la marca país: poder ofrecer más y mejores rutas turísticas al mundo en armonía con la naturaleza.
- Atraer inversión a gran escala en los lugares de mayor proyección turística. Como hizo República Dominicana en Punta Cana, pero con acciones que incluyan curaduría arquitectónica.
- Tal esfuerzo para atraer inversión a gran escala debe apoyar las iniciativas turísticas de los municipios más pequeños, para que estos puedan intervenir su infraestructura con la estética del mundo contemporáneo, al tiempo que generan nuevas oportunidades de ingreso para sus habitantes.
- Impulsar las iniciativas para que la industria diseñe tarifas que no excluyan al turista nacional. En nuestro gobierno se concertará con las aerolíneas una reducción importante del valor de los tiquetes, a la vez que se invitará a nuevas empresas de transporte aéreo, para que amplíen la oferta comercial y las conexiones de Colombia con el mundo.
- Transformar el sistema de servicios impulsando la calidad en los circuitos de gastronomía, hotelería y transporte. Trabajar fuertemente en la capacitación para la atención del turista, haciendo énfasis en el dominio del inglés de buena parte de los prestadores de servicios turísticos.
- Fomentar el turismo sostenible (a partir de la política pública de turismo), orientándolo al respeto y conservación del medio ambiente, con el propósito de hallar el equilibrio entre la actividad económica y la biodiversidad.
- Promover en el extranjero el turismo ecológico para aprovechar la oferta que brindan nuestros Parques Nacionales. Este proceso hará parte primordial de la agenda de política exterior y servirá para integrar a los actores culturales artísticos que promuevan internacionalmente las bondades de nuestro territorio.
- Apoyar las iniciativas digitales de turismo, acompañadas de una regulación que brinde seguridad al turista.
- Evaluar la conveniencia de recuperar la marca país “Colombia es Pasión”.
Finalmente, el turismo también aparece mencionado en el eje temático de “Industria” y en el de “Comercio exterior”, particularmente en lo referente al restablecimiento de las relaciones económicas y diplomáticas con Venezuela, que según lo consignado en el plan se dará el mismo 7 de agosto cuando Hernández asuma la Presidencia. “La normalización aumentará el número de exportaciones de productos colombianos a ese país, reactivará el turismo y se podrán adelantar proyectos de impacto regional”, señala el documento.
El turismo en el plan de Petro
El turismo es uno de los siete pactos y seis “democratizaciones” que integran el gran capítulo “De una economía extractivista hacia una economía productiva”. El capítulo se llama “Pacto por un turismo en armonía con la vida” y señala que el turismo de naturaleza, comunitario, cultural, de salud, científico, entre otros, será protagonista en la transición económica, como uno de los mayores generadores de bienestar económico y social local.
“Aprovecharemos la capacidad de este sector como fuente de divisas con bajo impacto negativo en la balanza de pagos y estableciendo las medidas necesarias teniendo en cuenta las repercusiones actuales y futuras, económicas, sociales y ambientales para satisfacer las necesidades de los visitantes, de la industria, del entorno y de las comunidades locales, en línea con la OMT”, apunta el documento.
APAprovecharemos la capacidad de este sector como fuente de divisas con bajo impacto negativo en la balanza de pagos
Señala además: “Incentivaremos la asociatividad, la acción comunitaria y solidaria para democratizar un turismo que esté plenamente comprometido con el ambiente y la cultura local” y agrega que “el Estado acompañará a los entes territoriales y a las formas asociativas comunitarias”. Y concluye: “Fortaleceremos la base económica-productiva necesaria de los municipios que profundice la autonomía, aprovechando sus potencialidades y buscando reducir las principales desproporciones entre ellos”.
Objetivos planteados:
- Incentivaremos la asociatividad, la acción comunitaria y solidaria para democratizar un turismo que esté plenamente comprometido con el ambiente y la cultura local (…) el Estado acompañará a los entes territoriales y a las formas asociativas comunitarias.
- Fortaleceremos la base económica-productiva necesaria de los municipios que profundice la autonomía, aprovechando sus potencialidades y buscando reducir las principales desproporciones entre ellos.
- Rehabilitaremos la navegabilidad y la infraestructura fluvial con el propósito de fortalecer la productividad nacional, la actividad turística y el desarrollo socioeconómico de las comunidades.
- Se impulsará el desarrollo de sistemas agroforestales, silvopastoriles, de aprovechamiento de productos no maderables del bosque y turismo de naturaleza bajo el liderazgo de organizaciones comunitarias.
- Se brindará apoyo técnico y económico para transitar a modalidades sostenibles y/o a impulsar actividades agropecuarias, de turismo local o hacia nuevas oportunidades laborales con el modelo de producción de energías renovables.
- Impulsaremos un turismo no depredador articulado al arte y el patrimonio, el paisaje natural y cultural se gestionará con las comunidades que históricamente han habitado los territorios.
- El arte popular será vinculado de manera estratégica a ofertas, planes y corredores de la política de turismo cultural, creativo y recreativo como apuesta para promocionar nuestros territorios y valoración de las prácticas tradicionales y patrimoniales.
- Revitalizaremos los 46 centros históricos del país, para vincularlos al desarrollo turístico y a la memoria colectiva e histórica.
- Se fortalecerán e impulsarán el Centro Nacional de Memoria Histórica (CNMH) y el Museo de Memoria de Colombia (MMC), como entidades que desarrollan procesos de memoria histórica y espacios de conocimiento de la historia y memoria del conflicto armado en nuestro país
Las referencias al turismo aparecen, además, como apoyo a propuestas de rehabilitación de la navegabilidad fluvial; de desarrollo de sistemas agroforestales – bajo el liderazgo de organizaciones comunitarias–; y como apoyo a la cultura. “Impulsaremos un turismo no depredador articulado al arte y el patrimonio, el paisaje natural y cultural se gestionará con las comunidades que históricamente han habitado los territorios”, señala el documento.