Angat, nace un nuevo gremio gastronómico

Con una agenda clara de sostenibilidad, digitalización y proyección turística —inédita en el sector restaurantero y gastronómico— inició de lleno este año la Agremiación Nacional de Gastronomía y Turismo Sostenible (Angat).

Llenar vacíos de representación en el sector gastronómico, impulsar una agenda de sostenibilidad en los establecimientos y posicionar su nueva app como un epicentro de una gran comunidad sectorial son, a grandes rasgos, los objetivos iniciales de Angat; el naciente gremio gastronómico que llega pisando fuerte al sector Horeca, respaldado por amplia experiencia gremial de sus socios fundadores.

Con más de 22 años de trayectoria en el sector, Claudia Hernández lidera la iniciativa como presidente ejecutiva del gremio. Junto a ella, como socios fundadores, están Gabriel Calderón y José Acuña, ambos empresarios gastronómicos y exdirectivos gremiales. De ahí, precisamente, la visión de crear una nueva instancia que incorpore temas fundamentales como, por ejemplo, el aprovechamiento de la digitalización para crear comunidad con un foco en la competitividad de los empresarios.

Es el caso de la nueva app Angat, una iniciativa pionera y carta de presentación de la agremiación ¿De qué se trata? Básicamente, de conectar proveedores con negocios y negocios con proveedores. En la app —que ya está disponible para todos los interesados— los establecimientos del sector Horeca pueden darse de alta y acceder a un universo de proveedores, desde alimentos o reparaciones, hasta marketing, contaduría o entretenimiento. Y viceversa, todo por geolocalización.

La idea, como se mencionó, es crear una comunidad sectorial que satisfaga las necesidades de los afiliados de una manera bastante práctica, ya sea que se necesite un plomero, un electricista, un cantante o, por ejemplo, un proveedor de productos orgánicos. “En la medida en que sean más afiliados, tanto restaurantes como proveedores, lo que va a permitir es ahorrarse la intermediación. Nosotros, como gremio, vamos a hacer el puente”, explica Acuña.

La agenda de la sostenibilidad llega al sector gastronómico

Lo anterior es la articulación de tecnología, sostenibilidad y labor gremial, afirma Hernández. Se han dado, por ejemplo, acercamientos con la Mesa de comercialización de la Gobernación de Cundinamarca para que los campesinos puedan vender directamente a los restaurantes sin intermediarios a través de la aplicación. Son proyectos que están sobre la mesa y en la agenda del gremio.

“Uno de nuestros objetivos es que en cinco años los restaurantes tengan al menos una práctica sostenible. Hoy son muy pocos los restaurantes que tienen implementadas prácticas de este tipo y queremos que la semilla que estamos sembrando hoy se vea reflejada en el futuro”

Claudia Hernandez, presidente ejecutiva de Angat.

La apuesta es clara y misional. En un sector enorme, en donde hay asociaciones locales en ciudades como Cali y Medellín, la idea no es competir sino posicionarse con una agenda clara y efectiva en torno a la sostenibilidad y la digitalización. Un mensaje que también debe ser claro para los empresarios gastronómicos: las prácticas sostenibles, a la larga, implican ahorros.

Acuña, que es chef y restaurantero, lo tiene bastante claro. El empresario refiere el caso de éxito de uno de los establecimientos aliados: “En los costos de un restaurante, hay una delgada línea que no se puede cruzar y es entre el 30 % y el 33 %. En el restaurante en cuestión, con un modelo montado de prácticas sostenibles, el costo es 25 %. Por desconocimiento, los restauranteros pueden pensar que sostenibilidad implica una gran inversión y no es así”.

Angat, construyendo representación gremial  

De otro lado, han sido meses de ardua labor para construir una representación gremial respaldada, además, por una cantidad considerable de afiliados. Se trata de ser la voz de ellos, apunta Hernández, desde los aspectos básicos, operativos y regulatorios que involucran a las entidades distritales y municipales —con quienes ya se han sentado—, hasta una representatividad nacional que tenga la fuerza de llegar “a donde se hacen las leyes, el Congreso de la República”, apunta Acuña.

El propósito es atraer afiliados de todo el espectro restaurantero, incluidas las cadenas que en el pasado buscaron representatividad en el seno de la ANDI, que no es precisamente un gremio especializado en el sector. Y en este contexto, el turismo es una de las apuestas: “Esta agremiación no solo quiere enfocarse al sector gastronómico, también al sector turístico”, señala la presidente.

“Hace 15 años los restaurantes no eran considerados del sector turístico; esa fue una lucha que tuvimos. Ahora claramente son un eslabón. Los turistas llegan a un destino y lo primero que buscan es un lugar donde comer. Entre más viajeros lleguen a Bogotá, más clientes visitan los restaurantes. Si se fortalece el sector turístico, nos fortalecemos nosotros”

Claudia Hernandez, presidente ejecutiva de Angat

Ahora bien, la participación del sector gastronómico en la industria turística, y en Fontur particularmente, no es precisamente nueva, pero tampoco ha sido la más fuerte. Hoy, a pesar de la clara relación entre gastronomía y turismo, el reto no es menor a la hora de que los restauranteros se sumen, por ejemplo, a la contribución parafiscal. Para ellos es, a la larga, un impuesto más. Ahí hay un trabajo que, de hecho, está en marcha.

Uno de los proyectos más interesantes y necesarios de Angat es la creación de un observatorio gastronómico. “Un observatorio juicioso, porque el sector turístico, y en especial el gastronómico, no tiene cifras reales. El DANE tiene unas cifras, los gremios otras, las Cámaras otras”, apunta Hernández. En materia de turismo, también hay conversaciones con el Viceministerio de Turismo para sumarse a la mesa gastronómica. Un nuevo camino empieza a abrirse.