Con menos de un año de gobierno, Ricardo Galindo, viceministro de Turismo, nos contó cuáles serán las prioridades y lineamientos de su gestión, que está marcado por la necesidad de impulsar la reactivación, la reglamentación de la Ley de Turismo y, en general, plantear el camino para el futuro del sector en el país.
¿Cuáles serán los lineamientos de la gestión para lo que queda de gobierno?
Tenemos un lanzamiento de un par de políticas. La política del turismo cultural, que realizamos entre el Ministerio de Comercio y el Ministerio de Cultura, está muy avanzada y se encuentra en comentarios para socialización del público. El plazo era hasta el 29 de septiembre para recibir los comentarios del público y, después de eso, lanzarla hacia finales de noviembre.
También realizamos en el Día Mundial del Turismo el lanzamiento de una herramienta de turismo sostenible, que le permitirá a los empresarios adoptar prácticas de sostenibilidad y competitividad sostenible para que la puedan adaptar a sus productos.
De otro lado, hemos venido trabajado en la reglamentación de la Ley 2068, que es el nuevo marco regulatorio del turismo. Hemos trabajado en cerca de 12 resoluciones que están expedidas o que van a salir. Entre ellas puedo destacar el registro de alojamiento, el incentivo del 9% para la renta, la regulación para el Registro Nacional de Turismo y la norma para las plataformas digitales.
La situación del turismo, a pesar de que ya estamos en reactivación, sigue siendo crítica. ¿Qué medidas adoptará el Viceministerio para afrontar el desafío?
Sin lugar a dudas, es el sector más golpeado: fue el primero en cerrar y casi el último en abrir. Esto generó un tema muy complejo para los actores de la cadena, pero han sido muy resilientes, aguerridos, recursivos y creativos. Ellos se han venido reinventando, por fortuna. Desde el ministerio hemos apoyado con diferentes incentivos: en la Ley de Inversión Social se mantuvo la exención para la sobretasa de energía, que puede implicar gastos del 12% de los costos de los actores. En la Ley de Turismo, se mantuvo hasta 2022 la reducción del 19 % al 5 % en los tiquetes y eso es un incentivo muy importante para tener un acceso más económico.
Además, hemos venido trabajando en apoyos con los entes territoriales articulando proyectos en diferentes sectores para promoción, competitividad, calidad e infraestructura turística con Fontur, que es el brazo ejecutor de los recursos del Ministerio.
Estamos muy esperanzados, y las cifras así nos lo señalan, de que el turismo está empezando a reaccionar. El turismo local es el que ha venido jalonando la recuperación del sector y esperamos que en diciembre y enero tengamos unas cifras similares a las que teníamos prepandemia. Incluso, en algunos destinos como Cartagena, San Andrés y Santa Marta se han registrado ocupaciones incluso superiores a las de 2019 en algunos puentes festivos.
¿Cuáles son las metas turísticas establecidas para este año?
Son unas metas mucho más modestas de las que teníamos inicialmente previstas, porque el 2019 fue un año histórico, de récords. Tuvimos cerca de 4 millones y medio de visitantes no residentes en Colombia. En el primer semestre, estuvimos cerca de los 600.000, por lo que estaremos muy sobre el límite. Este año tenemos una meta cercana al millón doscientos, cercana al 25% de lo que teníamos para esa época, porque la recuperación era muy incierta. Las metas son mucho más modestas y la tarea se está haciendo y, por fortuna, el país está empezando a reaccionar
¿Qué estrategias han planteado para los mercados internacionales?
Hablamos de tours de prensa con gente especializada, press trips y fam trips, tomas con las diferentes aerolíneas con las que tenemos acuerdos. También hacemos presencia y participamos en las diferentes ferias del mundo. Ha sido una estrategia articulada y muy robusta que se ha venido trabajando con ProColombia desde hace muchos años.
