Según una investigación de la Asociación de Viajes de Estados Unidos (U.S. Travel Association) y Euromonitor International, el país norteamericano ocupa el puesto 17 entre 18 mercados turísticos en términos de competitividad global.
Décadas de inversión insuficiente y falta de atención y coordinación por parte de las autoridades federales han hecho que Estados Unidos se quede atrás, mientras que otros países han aplicado activamente estrategias sólidas para aumentar los viajes y su producción económica, es la conclusión principal de un estudio encargado por Asociación de Viajes de Estados Unidos y presentado al público la semana pasada.
El propósito de la investigación, según explicaron desde el gremio, fue comprender mejor la lenta recuperación de los viajes internacionales entrantes a Estados Unidos con miras a identificar una estrategia para competir de manera más efectiva por el mercado internacional durante la próxima década.
En términos de cifras de turistas, el estudio destaca la caída de Estados Unidos al tercer lugar en visitantes internacionales, por debajo de España y Francia. Además, la participación de Estados Unidos en el mercado global de viajes de larga distancia disminuyó del 5,4% en 2019 al 5,3% en 2023.
Se estima que Estados Unidos recibió en 2023 casi 67 millones de visitantes internacionales frente a 79 millones de 2019, es decir, una recuperación del 84% frente a la prepandemia, “lo que está muy por detrás de las tasas de recuperación de otros competidores”, señala la organización.
El estudio evaluó cuatro categorías (1. Liderazgo nacional; 2. Marca y producto; 3. Seguridad y facilitación; 4. Viajes y conectividad) en 18 países de todo el mundo, entre estos Brasil y México. El país norteamericano ocupó el primer lugar en la categoría 4 y una calificación destacada en la categoría 2, “gracias, en parte, a la eficacia de Brand USA”, pero su desempeño en las categorías 1 y 3 fue “notablemente inferior”.
En Liderazgo nacional, por ejemplo, ocupó el último lugar. Entre las razones que esboza el estudio se destaca la ausencia de un ministro de turismo, a diferencia de los otros países que cuenten con esta figura consolidada desde hace varios años.
“Estados Unidos tiene un subsecretario de Comercio para Viajes y Turismo, pero el Congreso aún no lo ha cubierto ni financiado completamente. Estados Unidos tiene pocas políticas federales específicas y pocos fondos para aumentar las visitas entrantes”, señala el estudio.
No menos crítico es la Seguridad y facilitación, en la que los excesivos tiempos de espera excesivos para las entrevistas de visas es, sin duda, el principal escollo para una buena calificación. “Estados Unidos también ocupa una posición desfavorable en términos del número de países a los que permite viajar sin visa, otorgando el privilegio a sólo 42 naciones, muy por detrás del Reino Unido, que permite a 102 países viajar sin visa”, señala la investigación.
“El Gobierno estadounidense no puede ignorar los pasos audaces y decisivos que otras naciones están tomando para avanzar y modernizar sus economías de viajes. Estados Unidos debe aspirar a liderar el camino hacia una nueva era de viajes fluidos y seguros y capitalizar las oportunidades para hacer crecer este sector”, manifestó el presidente y director ejecutivo de la Asociación de Viajes de EE. UU., Geoff Freeman.