Los organismos que gestionan el comercio exterior de Brasil -la Agencia Brasileña de Promoción de Exportaciones e Inversiones (ApexBrasil)- y la promoción del turismo internacional -la Agencia Brasileña de Promoción del Turismo Internacional, Embratur- retomarán el uso del logotipo que el país utilizó como marca país entre 2005 y 2019.
La medida forma parte de una nueva estrategia de posicionamiento de la imagen de Brasil, ahora centrada en la sostenibilidad y el cuidado del medio ambiente. Por ello, la marca fue desarrollada con curvas y colores que valoran la diversidad cultural y natural del país.
“Es un símbolo de la reconstrucción de Brasil y un mensaje al mundo de que el país de la sostenibilidad, la diversidad y del respeto está de regreso”, afirmó Marcelo Freixo, presidente de Embratur, quien añadió: “El turismo es una de las actividades económicas más importantes del mundo y quizá la que más garantiza la conservación; nadie quiere visitar un país que destruye y quema sus bosques, porque prefieren visitar un Brasil que preserva y tiene responsabilidad climática”.
“Queremos que nuestro respeto por la fauna, la flora, los bosques, la vida y la democracia sea admirado por el mundo y que el mundo venga a visitarnos”.
Marcelo Freixo
Creada en 2005 por el diseñador e ilustrador Kiko Farkas, Marca Brasil es el resultado del primer plan de marketing internacional de Brasil en el exterior. Fue concebida para realzar la identidad colorida de Brasil, y, para ello, adopta el verde de los bosques; el amarillo del sol, la luz y las playas; el azul del cielo y de las aguas; el rojo de las fiestas populares, y el blanco de la indumentaria y la religiosidad popular.
El manual de símbolos del turismo brasileño explica que “nada representa tan bien a Brasil como la curva. La sinuosidad de las montañas, el vaivén del mar, el diseño de las nubes, de las playas. La alegría de nuestro pueblo está cargada de subjetividad, y la subjetividad es curva, así como la objetividad es recta”.
En la ceremonia de relanzamiento de la marca, el presidente de ApexBrasil, Jorge Viana, destacó que la gran concentración de biodiversidad y riqueza natural de Brasil, junto con la responsabilidad climática, crean una gran oportunidad para promover el turismo brasileño a nivel internacional. “Esto marcará la diferencia cuando Brasil vuelva a situarse en la agenda positiva del planeta y como solución a la crisis climática.
“El Brasil que Embratur promoverá es el Brasil que estamos construyendo, que lucha contra la pobreza, combate el racismo, es sostenible y sumará esfuerzos para hacer frente a la crisis climática, y el mundo lo entenderá y querrá sumarse. El mensaje es: ayúdennos a ser el Brasil que el mundo admira”.
Marcelo Freixo
Por su parte, la ministra de Medio Ambiente y Cambio Climático, Marina Silva, aseguró que el turismo es una de las alternativas para que “las reservas forestales brasileñas se conviertan en instrumentos de protección medioambiental, pero también de desarrollo económico e inclusión social”.
La funcionaria enumeró las prioridades de la acción conjunta entre el Ministerio de Medio Ambiente, el Ministerio de Turismo y Embratur, como la promoción de los Patrimonios Naturales de la Humanidad reconocidos por la UNESCO y la mejora de la infraestructura para visitar los parques nacionales, siguiendo el ejemplo de prácticas similares en países como Argentina, Chile y Sudáfrica.
Para la Ministra de Turismo, Daniela Carneiro, “el turismo sostenible es la solución“, y destacó el éxito de los destinos que realizan turismo comunitario para atraer turistas internacionales y promover políticas de preservación del medio ambiente. Carneiro insistió en la necesidad de priorizar la formación de los trabajadores para el turismo internacional y ampliar las inversiones en infraestructura.
Como complemento a la ceremonia celebrada en Brasilia, el lanzamiento también incluyó la proyección de la marca en los siguientes monumentos:
- Cristo Redentor, en Río de Janeiro;
- Fuente luminosa de la Torre de TV de Brasilia (DF);
- Puente Estancado, en Teresina (Piauí);
- Ópera Arame, en Curitiba (Paraná);
- Casa do Emigrante, en Cuarapuava (Paraná);
- Palacio de Gobierno, en Rio Branco (Acre);
- Castillo Torre Garcia D’Avilla, en Praia do Forte, Mata de São João (Bahía);
- Arcos do Natal Luz, en Gramado (Rio Grande do Sul);
- Praça Central da Cidade, en Bonito (Mato Grosso do Sul);
- Iglesia de Santa Rita, en Paraty (Rio de Janeiro);
- Palacio República dos Palmares, en Maceió (Alagoas).