Un día bastante agitado para la industria aérea se vivió este lunes con lo que pareció ser un amago de crisis por cuenta del suministro de combustible de aviación. Crónica de una tormenta más mediática que operativa.
La jornada inició muy temprano con una rueda de prensa liderada por Ecopetrol, el Ministerio de Minas y Energía y el Ministerio de Transporte en donde se informó que el abastecimiento de combustible de aviación estaba garantizado en Colombia. Para esas horas de la mañana se mantenía, sin embargo, una situación de posible desabastecimiento en algunos aeropuertos por las complicaciones inherentes en las cadenas de suministro.
Al respecto, María Constanza García, ministra de Transporte, afirmaba: “Ayer (domingo), tuvimos a lo largo del día una serie de reuniones en donde estuvo reunido todo el ecosistema y creo que para todos fue claro que el país está garantizando la producción de combustible de aviación. Lo que estamos afrontando es una verificación de cómo están los inventarios en los diferentes aeropuertos para, frente a eso, poder hacer una coordinación, una logística adecuada y minimizar al máximo las decisiones que se tengan que tomar sobre la operación”.
A su vez, Andrés Camacho, ministro de Minas y Energía, señaló en ese mismo escenario que se adelantarían inspecciones a cada una de las comercializadoras para evidenciar y verificar sus inventarios. “Hemos solicitado a la Superintendencia de Industria y Comercio las acciones para verificar las posibles fluctuaciones y verificar las condiciones del mercado que se han presentado durante esta contingencia” dijo el funcionario.
Efectivamente, durante la mañana del lunes las decisiones sobre la operación por parte de las aerolíneas se hicieron saber. Avianca anunció ajustes de itinerarios, cambios sin penalidad y cierres temporales de ventas de algunos vuelos, entre tanto, Latam Airlines confirmó la cancelación de 36 vuelos el martes 27 de agosto con el objetivo de optimizar los inventarios de combustible.
Los anuncios de las dos aerolíneas no fueron gratuitos. Ambas compañías soportaron su decisión en las alertas de una inminente escasez de combustible informada durante el fin de semana por parte de los distribuidores de combustible. Las decisiones operativas se sustentaron, además, en la circular emitida por la Aerocivil el domingo 25 de agosto que autorizó a las aerolíneas a adecuar sus operaciones a la disponibilidad de combustible.
En el transcurso del día la situación comenzó a cambiar. Entre las 15:00 y 16:00 la Aeronáutica Civil emitió sendos mensajes a través de su cuenta en X en donde aseguraba la plena disponibilidad de combustible Jet A1 en la cadena mayorista para soportar la operación de las aeronaves de servicios aerocomerciales. “No serán aceptadas cancelaciones de vuelos atribuidas a esa circunstancia”, afirmó públicamente la autoridad aérea.
Al final de la tarde, la Aeronáutica Civil confirmó la derogación de la circular informativa del 25 de agosto, “emitida de manera preventiva”, según enfatizó Sergio Paris, director de la Aerocivil, quien no se había pronunciado hasta ese momento. Minutos antes, Latam Airlines emitía un comunicado confirmando que sus distribuidores de combustible de aviación le notificaron el tránsito hacia la normalización del abastecimiento.
“Recibimos con optimismo esta comunicación de los distribuidores con la cual Latam Airlines podrá retomar su operación normal para lo que resta del mes a partir del miércoles 28 de agosto. En cualquier caso, la compañía continuará monitoreando el estado de inventarios de sus distribuidores en cada uno de los aeropuertos donde opera hasta que tengamos un parte de total tranquilidad”
Santiago Álvarez, director ejecutivo de Latam Airlines Colombia.
Posteriormente, Avianca confirmó la buena noticia: “Avianca recibió confirmación oficial por parte del principal proveedor de combustible de aviación sobre la eliminación de las restricciones impuestas y la normalización en el suministro de jet fuel requerido para cumplir con la operación de la aerolínea. En consecuencia, Avianca reabre a la venta todas sus rutas y mantiene los itinerarios publicados”.
Al respecto, Frederico Pedreira, director ejecutivo de Grupo Avianca, declaró: “Recibimos positivamente y con sorpresa la notificación del principal distribuidor de combustible de aviación, informándonos la normalización en el abastecimiento de combustible en todos los aeropuertos del país. Esto nos permite operar regularmente nuestros vuelos a partir de mañana y cumplir con los planes de miles de clientes”.
Y concluyó: “Esta coyuntura sin duda evidencia la necesidad de que los actores de la cadena de abastecimiento se anticipen y coordinen mejor para tener claridad sobre inventarios y disponibilidad de combustible”.
¿Descoordinación? ¿necesidad de medidas estructurales? ¿Importación de combustible?
Ante el novelón del lunes y su aparente finalización, muchas dudas quedan sobre lo que realmente sucedió en el detrás de cámaras, sobre todo, tras un nuevo mensaje del primer mandatario en donde puso en duda que la falla eléctrica de la Refinería de Cartagena (Reficar) hubiera sido la causa primordial del desabastecimiento.
Sin embargo, más allá de la política, desde el seno del sector aéreo son plenamente conscientes de que esta desafortunada situación pudo haberse evitado. Así lo señaló la IATA el pasado viernes (23.08.2024) al confirmar que la asociación venía trabajando de la mano de las autoridades y actores de la cadena para mitigar una reducción del 8 % en el suministro de combustible por cuenta de la falla en Reficar.
“De tiempo atrás, el sector aéreo ha venido colaborando con la autoridad aeronáutica, con el Ministerio de Minas y Energía y con Ecopetrol para detectar e implementar acciones estructurales que ayudarían a manejar este tipo de contingencias en el futuro. Es importante que, hacia adelante, se apliquen medidas enfocadas en el acceso a la información completa y oportuna sobre el estado del suministro de combustible y la posibilidad de utilizar Jet A como el combustible de referencia en el país”.
Comunicado IATA – 23 de agosto de 2024.
Santiago Álvarez, director de Latam Airlines, declaró al respecto: “Como lo hemos dicho en los últimos días, no da espera tomar medidas como permitir la importación de JetA por Ecopetrol y otros actores de la cadena, evaluar el aumento de capacidad de producción de las actuales refinerías y establecer mecanismos claros de asignación de combustible importado para distribuidores y consumidores finales, entre otras”
Desde la Asociación Latinoamericana y del Caribe de Transporte Aéreo (ALTA) también se pronunciaron durante el fin de semana para pedir claridad al Gobierno frente a los mecanismos de planificación de capacidad versus demanda y los inventarios existentes de combustible. La asociación regional recordó que el combustible representa alrededor del 35% de los costos operativos de una aerolínea y como tal tiene un peso importante en la estructura que define el precio del tiquete aéreo.
“Considerando que el combustible importado es más costoso y que en una compra inminente se hace a precios aún más elevados, se solicitan mecanismos claros, preventivos y eficientes con el objetivo de que no impacte desmedidamente el costo de los tiquetes aéreos y no se perjudique al usuario de este transporte esencial”.
Comunicado de la Asociación Latinoamericana y del Caribe de Transporte Aéreo (ALTA)
Y es que la coyuntura de este lunes 26 de agosto puso sobre la mesa una situación estructural de la que no se ha hablado lo suficiente: la necesidad que tiene hoy el país de importar entre el 8 % y 10 % de la demanda de combustible de aviación por cuenta de la ampliación de la operación aérea. Así lo confirmó Ricardo Roa, presidente de Ecopetrol, durante la mañana del lunes.
“La demanda de combustible de aviación ha venido incrementándose en los últimos meses en un 6 %. Veníamos atendiendo 35.000 barriles día, pasamos en los últimos meses a 37.000 y la expectativa para los siguientes meses es de 41.000 barriles día. Vamos a tener que importar JetA1 del mercado internacional en unas cantidades entre el 8 % y 10 % para atender esa creciente demanda”, afirmó Roa.
El funcionario afirmó, de hecho, que la importación de los 100.000 barriles de combustible aviación que llegarán al país en las próximas semanas se acordó antes de la contingencia de Reficar. ¿Se incrementará el costo de los tiquetes por cuenta de la importación de JetA1? Según los cálculos de Roa, no ocurrirá tal cosa: “Hoy un barril producido en Colombia tiene un costo de 94,5 dólares. La importación que requerimos debe estar en el orden de los 2500 a 3000 barriles día y va a costar unos 105 dólares el barril; es cerca del 8 % de la demanda. El impacto sobre el precio del combustible tendría que ser marginal y no debería tener una implicación grande para el usuario final”, explicó en la mencionada rueda de prensa del lunes 26 de agosto.